Si usted es una persona con dificultades visuales, navegue el sitio desde aquí

Campo

 
lanacion.com | Las noticias que importan y los temas que interesan
Sábado 20 de octubre de 2012 | Publicado en edición impresa

Mercado de granos

Valores más en línea con la realidad

Por Enrique Erize  | Para LA NACION

 
 

Nunca como ahora las commodities agrícolas han estado en la mira de los fondos índice o de los fondos de inversión especulativos tradicionales. Nunca como ahora la plaza de Chicago ha estado tan expuesta a la decisión de posicionamiento de los llamados actores "no comerciales". Es así que las cotizaciones en dicha plaza, que ya han contabilizado las consecuencias de las dramáticas pérdidas en la cosecha estadounidense de maíz, se ven sometidas a los vaivenes de los denominados factores externos.

Durante las últimas semanas, y tal cual lo pronosticáramos un mes atrás, los valores se vieron expuestos al poder de fuego de los fondos y la habitual e inevitable toma de ganancias ratificó una vez más que en la plaza granaria se había estado verificando un overshooting (sobrerreacción) en materia de precios. Así las cosas, los valores hoy predominantes parecieran ajustarse más adecuadamente a la realidad. No obstante ello, la verdad es que la tarea de los fondos no es tan sencilla. Deben buscar una alternativa tan atractiva como las commodities agrícolas y de similar liquidez.

Así, se impone un vistazo a las cotizaciones del petróleo, el oro, la plata, el cacao, el azúcar o (en el terreno financiero) el S&P y el Nasdaq. Una vez realizada dicha tarea, y con los nuevos valores de nuestra plaza, ¡la soja y el maíz no parecen tan mala opción después de todo! A su vez, también podría decirse que la plaza granaria ya ha superado en buena medida la habitual presión estacional del ingreso de la cosecha estadounidense al circuito comercial.

En síntesis, hay que comenzar de nuevo. Es necesario volver a evaluar los fundamentos del mercado, toda vez que la violenta entrada y salida de los fondos de inversión podría perder fuerza de ahora en más. Nunca desaparecerán como actores de esta plaza, pero es probable que su presencia deje de ser tan excluyente como lo ha sido recientemente.

En dicho contexto, y desde el punto de vista de la oferta, el próximo evento es la cosecha sudamericana de soja. Mientras avanzamos en el calendario hasta febrero/marzo, la plaza va a evolucionar con volatilidad. Si el clima es favorable (ahora aparecen dudas sobre la intensidad de El Niño), los precios de la oleaginosa caerán. En el trayecto hacia esa eventualidad, es muy probable que el productor argentino encuentre nuevas y mejores oportunidades de cobertura que las actuales.

En cambio, la próxima oportunidad de reponer los bajísimos stocks de maíz en el nivel global se presenta recién con la próxima cosecha del hemisferio norte (a casi 11 meses calendario de hoy). Esta es una de las razones de nuestra insistencia en promocionar la siembra de maíz por sobre la de soja por estos pagos. Si la soja sudamericana se complica y los precios suben, los valores del maíz se verán arrastrados. Si no se complica, las cotizaciones del maíz se defenderán solas.

Necesidad extrema

La cuestión es sencilla. Los EE.UU. necesitan producir 400 millones de toneladas en la próxima campaña para arreglar el drama dejado por el ciclo 2012/2013. Para ello, deberán sembrarse algo más de 40 millones de hectáreas y obtener unos 100 quintales de rendimiento promedio. Todo un desafío y una espera de muchos meses para dar por superada la escasez actual.

No obstante ello, y en semejante contexto, ha resultado muy difícil frenar a los productores argentinos en su afán de realizar ventas forward desde que los valores comenzaron a superar los 175 dólares por tonelada y está resultando más difícil aún frenar semejantes intenciones frente a la propuesta de algo más de 190 dólares de las últimas semanas por el maíz forward para entrega en abril próximo.

Es comprensible la tentación de asegurar un valor históricamente alto y que permite capturar rentabilidad. Pero es necesario alertar sobre la fórmula de cálculo de las paridades. Muchos opinan que el descuento implícito en las ofertas de los compradores respecto de la paridad teórica es de sólo 10/15 dólares por tonelada. Eso es muy discutible si se observa sobre qué valor FOB de maíz argentino se realiza el cálculo.

En los últimos 16 años, el FOB argentino ha promediado un premio sobre la posición julio de la Bolsa de Chicago de entre 10 y 15 dólares por tonelada. Hoy, el FOB argentino declarado para esa posición muestra un descuento de 20 dólares por tonelada. En otras palabras, el castigo real es superior a los 30/35 dólares por tonelada.

Están quienes pretenden justificar dicha diferencia en la particular circunstancia que atraviesa la oferta estadounidense y su marcada escasez. Pero el maíz puesto arriba de un barco es maíz. No importa si es argentino o estadounidense. Para pensar dos veces antes de cerrar negocios..

TEMAS DE HOY La Fragata Libertad en GhanaIntervención estatalInseguridadViolencia de géneroSuperclásico