Muy pocas personas en el mundo tienen el privilegio de estar en la primera fila de un desfile de Chanel. Y de esos pocos afortunados, menos aún son niños de edad preescolar como la de Emme, la hija de Jennifer López. La pequeña, de cuatro años, fue con su madre y su novio, Casper Smart, a este acontecimiento, uno de los más esperados en cada Paris Fashion Week. Pero, como era de esperar, se aburrió de tanta salida y entrada de modelos mientras que Jennifer y Casper se lo pasaban divinamente.
La pequeña Emme llegó vestida como cualquier niña repipi de su edad, de rosa de los pies a la cabeza, pero con alguna peculiaridad. Y es que se puede distinguir en la cinturilla del vestido un broche con las dos ces entrelazadas de Chanel, así como un bolso blanco con cadena que también podría ser de la firma.
Por su parte, Jennifer lució una imagen muy Chanel, en blanco y negro y ciertamente minimalista acostumbrados a los looks ostentosos de la artista. Incluso su maquillaje (un sencillo eyeliner de tinta con labios nude) y joyería (un collar con un colgante y pendientes de brillantes) destacaban por su sencillez. Lo más llamativo, sus zapatos de charol en punta con un candado decorativo colgando sobre el empeine. Eran de Tom Ford.
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el ojo de la aguja
02 de octubre 2012 | 17:55 h.
me espantaaaaaaaaaaaaaaaaaaa OMG ! que horror! los tres son terribles.....
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ME
02 de octubre 2012 | 17:47 h.
Me parece ridículo esto de llevar a los niños a los desfiles cómo sí fuesen un complemento más. Y por otra parte me hace gracia que estos hijos de famosas se parecerán a sus madres pre-cirugía estética!