el pais

air europa

Tres ciudades, tres destinos a tiro de piedra,

  • Mercado de Portobello

    Londres
  • el Big Ben y el parlamento de londres

    Londres
  • El Museo Tate Modern
    foto: CARMEN VALIÑO

    Londres
  • London Eye
    foto: Gonzalo Azumendi

    Londres

Londres, un clásico renovado

No importa lo manidos o tópicos que resulten, los monumentos londinenses siguen constituyendo una parada imprescindible en cualquier visita a la capital británica
CARMEN MAÑANA

¿Se puede conocer la ciudad sin haber visto Buckingham Palace? La residencia de la reina Isabel II y el cambio de guardia que ante ella tiene lugar todos los días a las 11.30 resultan ineludibles. Casi tanto como el icónico Big Ben y la cercana abadía de Westminster. Y ya en esta zona del río es mejor no resistirse a las casas del Parlamento y, subiendo la calle Whitehall, a Trafalgar Square, que conmemora la batalla naval en la que los británicos se impusieron sobre la armada española.

En esta plaza se encuentra la National Gallery donde pueden contemplarse cuadros Velázquez, Van Gogh, Monet o Turner. Se trata de uno de los museos más visitados de la ciudad, que cuenta con una oferta pictórica tan basta que requeriría una visita exclusiva solo para abarcar los centros más asentados.

Entre ellos, cabe destacar el British Museum, famoso por su colección de arte egipcio y por atesorar la piedra Roseta, o el Museo de Ciencias Naturales, con sus impresionantes esqueletos de dinosaurios.

La Tate Modern, que ocupa el edificio de una antigua central eléctrica en la orilla sur del Támesis, es quizá el espacio más relevante dedicado al arte moderno. A él se puede llegar a través del Puente del Milenio, obra del arquitecto Norman Foster, que parte o termina, según se mire, en las proximidades de la catedral de San Pablo.

La pasarela es uno de las construcciones modernas que ya se han ganado la categoría de reclama turístico junto la London Eye, la noria gigante que se ha convertido en el símbolo del nuevo Londres.

También merece la pena hacer un alto para descansar en alguna de las magníficas zonas verdes de la capital, desde el inmenso Hyde Park a los Kensington Gardens o Green Park, frente a Buckingham.