Una juez de Barcelona ha abierto una investigación por un caso de presuntos malos tratos policiales a un detenido. La víctima, E. L. M., acusa a los Mossos d’Esquadra de haberle fracturado varios huesos de la mano retorciéndole la muñeca el pasado primero de mayo, día del trabajador. La juez admitió a trámite la querella y, después de insistir, logró que el Departamento de Interior le facilitase el nombre de los dos agentes que participaron en la actuación policial.

Poco antes del inicio de la manifestación, los Mossos exigieron a E. L. M. que se identificara. Según la versión policial, éste se negó y se encaró con ellos, por lo que acabó detenido. La policía llevó al manifestante por una falta de lesiones ante el juez, pero este lo absolvió porque no había indicios suficientes de culpabilidad. La querella recoge que el hombre estaba detenido y esposado cuando un agente de la Brigada Móvil (antidisturbios) de los Mossos se lo llevó junto a una furgoneta y le retorció la muñueca mientras le insultaba: “Ahora vas a cantar quién eres tú, tus amigos y tu familia”, le dijo el agente, siempre según la versión del denunciante.

La Dirección General de Policía facilitó a la juez el número de identificación (TIP) de varios agentes desplegados en la Gran Vía de Barcelona. La magistrada les requirió para que concretasen quién intervino en la intervención. Antes de citar a los dos mossos a declarar como imputados, la juez ha encargado el reconocimiento médico de E. L. M. para averiguar el tipo de lesiones que sufrió.