¿Obsesionado con tu mascota?
Caracol 1260 | Septiembre 16 de 2012
Cómo reconocer cuando el cariño a ese ser se convierte en un apego exagerado
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Por Carmen Graciela Díaz / Especial El Nuevo Día
El amor es tan divino como peligroso. La línea que separa al amor saludable de los excesos es muy fina y eso no solo aplica a las relaciones entre los humanos sino a los lazos que creamos con nuestras mascotas.
Las señales que dejan ver que el afecto hacia tu mascota es excesivo, de acuerdo con Mónica Ferrer, presidenta de la Fundación Ferrer que ayuda a animales maltratados o abandonados y Mariel Calderón, entrenadora de animales y editora de la publicación Pet ID, se perciben mayormente cuando los amos personifican a los animales.
De igual modo, Ferrer comparte que ha notado que quienes muestran un comportamiento que puede considerarse excesivo “no tienen hijos o sus hijos están adultos y entonces llenan ese vacío con las mascotas”.
“Los animales tienen capacidad de sentir, pero siguen siendo animales y hay gente que los trata como si fueran niños y les adjudican unas cualidades que realmente no les tocan. Y eso agobia hasta a los mismos animales porque no los deja ser animales”, explica Ferrer.
A su juicio, una manifestación exagerada se nota cuando las personas visten o disfrazan a sus mascotas máxime cuando con ello se les compromete su seguridad y su salud por el calor que les puede dar.
“Otro indicio”, dice Calderón, “es cuando las personas se cohíben de salir porque les da pena dejar a la mascota sola porque por ejemplo dicen que el perro se queda ansioso. No es que salgamos y dejemos al perro abandonado, pero al igual que con un niño hay que poner estructura para poder tener libertades y resolver dejándoles juguetes, hablar con algún vecino o dejarlos en algún lugar”.
Asimismo, a su juicio, existen casos de personas que se preocupan más por sus perros que por sus hijos. Por eso entiende que es necesario procurar el balance para no abandonar a uno sobre otro.
Ferrer comenta que también se dan los casos de los amos que atosigan a las mascotas con comida y ‘treats’ y, por ende, los tienen sobrepeso. “La manifestación de cariño más grande que les podemos ofrecer es darles una buena dieta y mantenerlos en buena condición física porque eso les garantizará larga vida”, puntualiza quien recuerda que ningún exceso es saludable y que darles más comida de lo debido puede incidir en problemas respiratorios.
“Los animales no son objetos. No son figuras que pones en ‘display’. No es que valgan menos pero entiendo que como todo, de la misma manera que a uno no le gusta que lo abacoren a ellos tampoco”, expone Ferrer. Otros puntos*Según Mariel Calderón, uno de los peligros más grandes es brindarle a la mascota exceso de libertades dado que esta puede tornarse agresiva e incluso adueñarse de la casa. “Es importante dar mucho amor a las mascotas pero siempre con disciplina”, afirma.*Calderón comenta que otra posible manifestación de amor excesivo respecto a las mascotas es tener una cantidad excesiva de animales que no se ajuste a tu estilo de vida y presupuesto. “En ese momento hay que distinguir entre amor y ser un coleccionista de animales”, dice.*Para Mónica Ferrer es clave que cada cual se analice y sea honesto consigo mismo en cuanto al tipo de relación que tiene con su mascota. “A la larga, quererlos es tratarlos con respeto, reconociendo que siguen siendo animales pero sin sofocarlos”, estipula.