Una puja entre pesos pesados

 El Grupo Román y una empresa accionaria de Hidrovía compiten para ver quién extrae los tres grandes buques inactivos del espejo de agua en el puerto marplatense, que despejará los muelles en el 2012.

Los sobres se abrieron y los competidores quedaron a la vista. Por un lado la UTE Emepa SA - Raúl Negro y Cía. Por el otro, Servimagnus SA. Ambos buscan quedarse con el negocio de la remoción de los buques Kronomether, Tehuelche y Mapuche, una obra que tiene un plazo de ejecución de casi dos años, con un presupuesto oficial del gobierno nacional de 22.291.500 pesos.

Por nombres propios, las empresas participantes no dicen mucho. Pero detrás de los sellos que avalan la documentación presentada en el Consorcio Portuario al momento de abrir la licitación, se destacan actores de peso en el negocio portuario.

Emepa es una empresa metalúrgica ubicada en Chascomús, a partir de amistades con el ex presidente Alfonsín, que se dedica a la reconstrucción y reparación de coches y vagones de ferrocarril. Pero también es socia de la empresa Hidrovía, la encargada del dragado del río Paraná, empresa en la que creció su participación accionaria, junto con la belga Jan de Nul.

Raúl Negro y Cía. aporta en la UTE con Emepa los conocimientos operativos que otorgan más de cincuenta años de prestigio en la actividad de salvamento y buceo. La UTE ofertó 22.084.845 pesos para quedarse con la obra.

Del otro lado del ring está Servimagnus SA, una empresa del grupo que lidera el empresario Ricardo Román. Además de los camiones, controla Loginter SA, con la que participa de la inversión de 300 millones de dólares en el puerto de La Plata.

Servimagnus también es conocida en la Administración General de Puertos (AGP), la autoridad que controla y supervisa las terminales portuarias concesionadas ya que intervino como parte de una UTE en el dragado de Puerto Nuevo en el 2007.

La empresa del Grupo Román cotizó la obra para retirar los tres buques en un monto total de 26.771.839 pesos. Los negocios parecen marchar sobre ruedas. Servimagnus figura en la lista de las empresas y particulares que compraron dólares en el 2007 y 2008 y los sacaron del país. En su caso hizo compras por 6,7 millones de pesos.

Las tres embarcaciones son las de mayor porte que se encuentran inactivas en la terminal local. Miden entre 72 y 82 metros de eslora y pesan hasta 2.200 toneladas. Estos factores imposibilitaron que las retire la grúa de salvamento de la Prefectura, que desde hace más de dos años viene retirando los cascos inactivos para que el Consorcio los venda como chatarra.

La puesta a seco de estos tres grandes cascos implicará para el puerto local recuperar unos 25.000 metros cuadrados de áreas operativas en distintos sectores de amarre de las escolleras Norte y Sur, espacios que una vez disponibles se afectarán a la futura terminal de cruceros y a la construcción de nuevos espigones, para los cuales ya hay empresas interesadas.

Según pudo averiguar REVISTA PUERTO, representantes de ambas empresas ya habrían tomado vista de los expedientes y de las propuestas del competidor y hasta el martes, no habían presentado impugnaciones.

El Consorcio Portuario Regional de Mar del Plata formalizó una comisión evaluadora, con personal especializado de la Prefectura y técnicos de la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables de la Nación, organismo que girará los fondos previstos para la obra, desde el Ministerio de Planificación Federal.

“Primero se analizarán las ofertas desde lo técnico”, contó una fuente del propio Consorcio, a la que tuvo acceso este medio. “Luego se verán las cuestiones económicas y legales fijadas por el pliego de licitación”, agregó.
Por ROBERTO GARRONE | Fotos de DIEGO IZQUIERDO

20/08/10
REVISTA PUERTO