En días más se firmaría el convenio con la Nación para iniciar el dragado. Además es inminente el ensanche y la ampliación de Martínez de Hoz. También habrá mejoras en pavimentos y luminarias.
Con la firma de un convenio con la Nación para que provea una draga; la repavimentación e iluminación en el sector de muelles, comercios e industrias; la ampliación de las oficinas administrativas y el ensanche de la avenida Martínez de Hoz, el puerto de Mar del Plata comenzará a recibir a partir de las próximas semanas un intenso plan de obras. Entre ellas, la más significativa consistirá en la limpieza de la boca de acceso, para erradicar el banco de arena ubicado junto a la escollera sur y rehabilitar así el canal de ingreso principal que desde hace varios años se encuentra totalmente obstruido por la acumulación de sedimentos.
Según le explicó ayer a LA CAPITAL el presidente del consorcio de administración de la estación marítima, Eduardo Pezzati, en días más desde la Casa Rosada se informará cuándo será realizado el acto para firmar un convenio por el cual, la Nación proveerá una draga y una importante suma de dinero para iniciar la obra. La semana pasada, en la inauguración de la Expopesca en la Base Naval, el gobernador de la Provincia, Daniel Scioli, conformó que ya está resuelto el mecanismo a través del cual finalmente llegará una draga a Mar del Plata para tratar de resolver un problema que hoy compromete seriamente la operatividad del puerto. Según dijo, en días más será firmado "un acuerdo con la presidenta (Cristina Fernández) y el Ministerio de Planificación", por el cual la Nación pondrá a disposición la Draga 259 y aportará unos 17 millones de pesos para solventar su tarea en la ciudad, la cual, podría extenderse por un plazo de, al menos, 14 meses.
Ayer Pezzati le confirmó a LA CAPITAL que el tema quedará definitivamente resuelto cuando la Presidenta regrese de Estados Unidos -adonde viajó para participar de la asamblea de la ONU- y se le ponga fecha a la firma del acuerdo. Según sus cálculos, la draga podría comenzar a trabajar a principios de noviembre y, si el clima acompaña, concluir dentro de unos 2 años. La situación del acceso al puerto es sumamente delicada y, de hecho, en el último mes varias embarcaciones sufrieron incidentes al ver limitada su capacidad de maniobra por la presencia del banco de arena. "Si esto no se resuelve de manera urgente corremos el riesgo de que, en cualquier momento, suceda un desastre", la aseguró a LA CAPITAL un empresario pesquero que, días atrás, sufrió como nunca ya que uno de sus buques casi encalla entre las dos escolleras cuando ingresaba cargado de pescado a Mar del Plata. "Hubo que trabajar durante varias horas con remolcadores para que el barco pudiera moverse, evitando que chocara contra el banco o se diera vuelta", comentó.
Para quienes trabajan en el puerto la situación es tan crítica que vuelve a su memoria la catástrofe ocurrida en 1964, cuando el buque Navarchos encalló al salir de Mar del Plata, se dio vuelta, esparció toneladas de cereales en Playa Grande y obligó a cerrar las operaciones de la estación marítima durante varios días.
22/09/08
LA CAPITAL - MAR DEL PLATA
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